Alma animal.

Las cosas pasan siempre al otro lado de la ventana, con tanta guerra fría no vamos a poder luchar. Y tu me preguntas si no merecería la pena cerrar el puño para poder romper el cristal.
Quizás nos falte ese algo que lo empuja todo. Eso invisible, aliento que anima el alma animal. Y así dejar de ser al menos muñecos de barro para poder salir a fuera.
Vivir por existir, sin levantar la voz, arrancando desde dentro del propio corazón las ganas de vivir, sin una explicación.
Salir corriendo no serviría de nada. En este laberinto nadie sabe donde está. Nadie sabe donde esta la salida, solo miran hacia delante y ya.
Quizás nos falte ese poquito de talento innato, que nos lleve por fin a un nuevo despertar. Y así después poder dormir tranquilo un rato, a un lado de la carretera.
Vivir por existir sin levantar la voz, arrancando desde dentro del propio corazón, las ganas de vivir sin una explicación.
Vivir por existir sin levantar la voz, arrancando desde dentro del propio corazón, las ganas de vivir sin una explicación.