Y al título que le jodan.

Voy a disfrutar de todo lo que me queda por andar. 
A aprovechar todo lo que me queda por caminar.
Voy a disfrazar toda la infelicidad.
A transformar en ciencia ficción los miedos.

Y si alguien quiere pensar que soy el dueño de la película le enseñaré el final,
que quizás la meta nunca se deba tocar con los dedos 
y sea mejor disfrutar cada paso.

A veces insistir no es la solución.

Y que sentir el suelo sea la satisfacción de que todo va, 
en la dirección que sea.

Y que si no es feliz, destrozamos el final 
y nos hacemos nuestra ciudad.

Y que deje de ser habitual el déficit de calidad.

Y si los sueños se vuelven pequeños nos montamos una orgía con las legañas puestas.